Sigue la puerta abierta, alguien ha dejado que Eolo se instale aquí con nosotros. Así que hoy pensaba hacer una tirada larga, pero con el viento tan fuerte y racheado, hasta la mtb me parecía una opción demasiado arriesgada, así que por segunda vez este año, el rodillo de rulos ha hecho su aparición estelar.
Desde que cambié de bici el verano pasado me había ido dando cuenta, pero el rodillo ha dictado sentencia.
El potro de tortura
Extra de motivación
La postura en la Storck, sin ir forzada, no me permitía soltarme de manos. En cambio la Canyon me aporta ese extra de estabilidad y comodidad. Es muy noble de reacción y ello hace que el otro día ya lo intentara y hoy lo he constatado. Me puedo soltar de manos
Foto hecha por mi Santa (Que paciencia la tuya....)
Hoy ya he podido estar un buen rato manteniendo el equilibrio, beber del bidón, mirar el móvil... Luego he intentado ponerme de pie y he levantado el trasero cuatro dedos del sillín, algo es algo.
Os recomiendo si teneis ocasión de subir la bici a un trasto de estos, luego en la carretera se traducirá en una mayor seguridad para vosotros y los que os rodean.
tengo uno igual lo uso dos veces por semana,martes y jueves una ahora cada vez, pues a las 7.30 cuando salgo del trabajo todavía es de noche, me pongo musica que me marque el ritmo del pedaleo y en una hora a plato grande 33/34km y una buena sudada. otra cosa para evitar demasiado roce y rodar mas comodo yo le meto a las cubiertas 9kl de presion. Saludos
ResponderEliminarGracias por tu comentario. Intentaré hacer eso de la presión que comentas.
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