Ya está, ya pasó, la primera brevet del año al zurrón. Una brevet marcada por el aire que sopló con mucha fuerza y no nos abandonó en casi ningún momento y en lo personal, por que debutaban 4 valientes en esto de las brevets, que después de oírme hablar mucho de ellas, cometieron la locura de apuntarse. Además Manolo, que el año pasado ya hizo el 200 y el 300 y este año quiere hacer las 4. Suerte!
No me buscan a mí, malpensados
Llegamos a Manresa sin novedad, aparco el coche justo detrás del de Miguel Ángel, un randonneur de los que anda, saludo a algunos, los breveteros somos pocos y nos conocemos todos aunque sea de vista.
Todos preparados
Cucu, soy yo!
El día frío, hace que lleve la chaqueta y los botines, es que claro según a quien preguntes la temperatura está entre 0º y 1º Si fueramos focas tendríamos hasta calor, pero no lo somos y la velocidad hace que las puntas de los dedos desaparezcan del mapa sensorial en cuanto empezamos a rodar los primeros km controlados por el coche que nos saca de Manresa agrupados.
Cada uno a su ritmo
Hay que comer mucho en una marcha
Conill con su ventilador a todo trapo
A los pocos km Pere avisa que Marín no viene, está recuperándose de una intervención y aún no tiene el golpe de pedal que tenía antes.
Pedrillo se descuelga y se queda con él, los cuatro restantes seguimos camino, vamos con buen ritmo, las fuerzas todavía intactas hacen que los km pasen rápidamente.
Primer control, antes de que se me olvide, genial la novedad de la señalización de la brevet en los cruces más conflictivos, para los que nos perdemos en el pasillo de casa era un alivio ver esos cartelitos amarillos.
Gracias por vuestro esfuerzo
Torà , Biosca, Sanaüja, este terreno es favorable para los percherones como yo y si a eso le sumas que en ese momento somos una veintena o más, rodar a 40 es fácil, fácil.
Antes de organizarnos
A esta le caen los km y ni se entera
Los Bicibaix le dan un puntito más en cuanto nos alcanzan, luego el muro final hasta alcanzar el control se las trae. Decido arriesgarme y me quito la chaqueta, el calor me va peor que un poco de frío.
La chaqueta a la bolsa
Surgen las dudas, desayunar o no "that's the question" que diría Macbeth. Yo hoy no tengo tiempo que perder. En cuanto acabe la brevet a casa, ducha y a trabajar!!!
Así se recuperan los campeones. Seguimos camino, pero justo antes de arrancar, Pedrillo y Marín aparecen, de momento no va tan mal como parecía. El pelotón en el que viajábamos arropados no nos ha esperado y con el viento tan fuerte que soplaba hoy eso nos ha castigado más de la cuenta. Rápidamente nos hemos separado en dos grupos, Manolo, Peter y yo tiramos para delante.
Animando desde la cuneta
Ahora toca subir, primero el coll de Clarà, donde a la salida del camino rural, las flechas te hacían dudar un poco, después la subida al coll de Torregassa, el techo de esta brevet, 700 metros por encima de Manresa.
Sube que te sube
La mitad de la faena
Me duele el c...
Para que luego digan que no se sube, menos mal!
La bajada hasta Sanaüja, rápida y con la perspectiva de una Coca-cola en el bar que paramos el año pasado hace que los km desaparezcan a golpe de pedal. Rellenamos bidones y ale, "sólo" nos quedan 60 km. A pesar de que nos vamos relevando las minicrisis están en oferta y de vez en cuando pillamos alguna.
Mi mejor perfil???
Los de Papiol en perfecta armonía
Km 163 Último control, la brevet está ahí, a pesar de eso sigo comiendo barritas e hidratándome, la pájara te puede llegar cuando menos te lo esperas. Me pasa el grupo de Papiol,un saludo Nuria!!! Van con ese puntito de más que me podría desfondar si los sigo, así que les echo una foto en la distancia y se van Tomo un gel y la verdad es que el nombre le viene al pelo, parece que comas champú. Ahora somos nosotros los que atrapamos a una grupeta de Sant Andreu que llevan a dos con el gancho. En la C 55 intentamos rodar todos juntos, pero la verdad es que me emociono y pego unos arreones que hacen que Manolo reviente y ya no nos pueda alcanzar a pesar de que aflojamos el ritmo. Pere Martí, uno de los organizadores y la mente maquiavélica (con cariño) que diseña estos recorridos nos indica el desvío por Callús perfectamente señalizado y afortunadamente cambian la entrada a Manresa, por que desde San Joan era dura entre la subida, el asfalto destrozado y los semáforos, ese par de km de callejeo se te hacían eternos. Sello, medalla y Coca-cola, otra más y van... llamada a casa para decir que todo ha ido bien. Peter habla con los otros, en el desvío del coll de Clarà se confundieron y tiraron para abajo,decide comerse un bocata y esperarlos. Mientras tanto llega Manolo, sólo me queda, estirar, desmontar la bici, cargarla en el coche y ya está, ahora sí se puede decir, la brevet de 200 al zurrón.
Que poquito queda
Bonita foto
Peter firmando su primera brevet, enhorabuena
La sonrisa lo dice todo
A por la siguiente
