lunes, 4 de mayo de 2015

Monegros 2015
















Si me venís siguiendo habitualmente, sabréis de mi poca actividad con la bici de montaña. A pesar de ello, aún no sé muy bien como, me dejé convencer para participar en la Maratón de los Monegros. 123 km de rodar, de subidas, aunque nadie te diga que las hay, bajadas, gente y polvo, mucho polvo.
Empiezo bien el día. La noche de antes puse el despertador mal y me levanto con el tiempo justo de lavarme la cara engullir un yogur y salir por la puerta con la bolsa en una mano y la bici en otra. Cargamos las bicis y nos distribuimos en los coches. A la altura de Martorell, empezamos a ver otros vehículos cargados de bicicletas, una verdadera expedición en toda regla. A mitad de camino paramos a tomar un café despertador.


Casi nadie participaba
 
Llegamos a Sariñena y ya no nos dejan pasar al pueblo, así que cogemos el camino a la ermita de Santiago donde aparcamos. Bajada al pabellón para recoger los dorsales. Un diez para la organización. Nos tratan de lujo y rápido.

  
 Fue rápido

 Ya con los dorsales, nos dirigimos a una zona de picnic donde engullimos el plato del día, ensalada de pasta, falla un poco la hora, las 10:30, pero la salida es a las 12.


El desayuno de los campeones

Montamos las bicis y tras un ajuste a la dirección de Daniel, vamos a por el cajón. Nos despedimos de José y Juan que estarán en otro. Rápido acceso  y a esperar hasta la salida. Salida, como siempre y esto no varía con la de la flaca, a saco. Antes de la salida del pueblo una ambulancia para atender a un herido y un voluntario nos para. Ya estoy solo, bueno con 5999 ciclistas más pero sin mis compañeros.


La sonrisilla nerviosa de la previa


Llevo el track y decido saltarme el primer avituallamiento en el km 33, llevo bebida y comida de sobra. El sol pega y el viento no aparece, así que día ideal. El ritmo endiablado, las bajadas a saco y el llano igual. Ya voy medio blanco y acabaré mucho peor, seguro.
Sin pulsómetro, a saco, aflojando cuando me noto ahogado. Empieza una subida, le pregunto a uno que llevaba el rutómetro en el manillar si eso era lo duro y me dice que sí. Pues nada, paciencia y a la derecha.
Después de leer en foros y como bien me dijo un compañero brevetero, la Monegros es como una estampida de ñus como las que se ven en los documentales que usamos para hacer la digestión. Así que siendo consciente de tus limitaciones y con un poco de suerte, puedes llegar de una pieza. De camino al segundo avituallamiento, pierdo un bidón que recogí después de una marcha celebrada cerca de casa, así que lo que la marcha me dio la marcha me quitó. Aceito el cambio y la cadena con un bote que llevaba por que eso sonaba ya demasiado y a correr. Toca un falso llano y con aire de cara. A pesar de ello tiro y tiro. En el tercer avituallamiento, pit stop de formula 1, relleno con agua y como un poco de todo. Me da nuevas energías para seguir tirando. La bajada del cañón… En fin, todo lo rápido que pude. Allí además se juntaban las dos marchas y te podías encontrar con algún problema de más.  Decido comer y beber cada media hora para que los amagos de calambres no me encuentren vacío. He de decir que en la última parte de la marcha no recuerdo que me pasara nadie salvo en los dos últimos km donde aflojé para evitar alguna caída tonta en las zonas estrechas.


Sucio pero contento



 Los pistones embarrados

Llegar, alguna foto para poder ilustrar la crónica, lavar la bici y reencontrarme con los colegas. Dos caídas, la de Juan que le impidió terminarla y la de Daniel al que un energúmeno tiró en plena subida.
Cargamos las bicis en los coches y de vuelta a casa.
Sensaciones encontradas, por un lado la de no repetirla y en el otro que de aquí a unas semanas surja la pregunta de: ¿Por qué no?

1 comentario:

  1. Es una marcha q me seduce y lo de la estampida de ñus... lo has clavado, polvo, y todas esas cosas pero igual mejor que con barro? y otra preguntilla: tú crees q con una bici de ciclocros estaría bien? yo ya con mi edad me he dado cuenta q lo mas importante de estas cosas es no hacerse daño y poderlo contar... habían cocodrilos esperando en los pasos de los rios como a los ñus??? es una de las cosas q mas me inquietan de los ñus, q no miran para atrás por si un cocodrilo ha pillado a un "compañero"... lo de los ñus en las salidas es una gran similitud!!!

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